Cuando hablamos de Cirugía Maxilofacial – Ortognática hacemos referencia a la cirugía del esqueleto facial. Las deformidades faciales o dentofaciales tienen una gran incidencia, ya que aproximadamente entre un 25 y 30% de la población tiene algún tipo de disarmonía facial. Se producen cuando uno o varios de los huesos que conforman la cara (maxilar, mentón, nariz, pómulos, mandíbula, etc.) tienen su posición, tamaño o forma modificada, perdiendo de este modo su armonía.
La sonrisa gingival, el avance del maxilar inferior o superior, o el tratamiento del prognatismo haciendo retrasar la mandíbula se encuentran entre los procedimientos habituales realizados en la cirugía maxilofacial.
Pasos que se siguen en nuestra clínica maxilofacial en Málaga
Cita diagnóstica
En la primera consulta, recibe información sobre la intervención y el cirujano le realiza el historial clínico. En las consultas previas a la intervención, es necesaria la exploración de las zonas a tratar, la medición de ciertos parámetros y del estado general de salud, y la realización de fotografías. La exploración física, junto con la edad y antecedentes personales, servirán para solicitar otras pruebas complementarias (ecografía, electrocardiograma, analítica, etc.) antes de la operación.
Las mediciones ayudan a establecer la técnica a emplear y las fotografías sirven para evaluar el resultado. Es importante que diga si padece alguna enfermedad importante; si toma alguna medicación; si fuma; o si tiene alguna alergia a algún producto o medicamento. Nuestro consejo es que ya que está en la clínica maxilofacial aproveche para preguntar cualquier duda que tenga.
Es importante comunicar al cirujano maxilofacial cuáles son sus expectativas, para que éste pueda explicarle si van a poder cumplirse o si hay limitaciones en las mismas. El cirujano le explicará que resultados pueden obtenerse y la técnica quirúrgica más adecuada a su caso. En la propia consulta se le informará sobre el coste de la intervención, la forma de pago y las posibilidades de financiación
Cirugía Maxilofacial
- El Preoperatorio
Como toda operación que precisa cirugía, es necesario un pre-operatorio en el que el cirujano le indique en la clínica los cuidados especiales, las analíticas, así como la lectura y firma del Consentimiento Informado, y una evaluación final para decidir el procedimiento más adecuado. Su realización requiere de un estudio cuidadoso de cada cara, de un tratamiento en equipo entre el ortodoncista y el cirujano, y del soporte de la planificación mediante programas informáticos.
- La operación
Nuestro cirujano le explicará de qué medidas habituales y extraordinarias de seguridad hay que tener en cuenta durante la intervención, así como a medio y largo plazo.
El cirujano elegirá los medios humanos y técnicos que considere mejor para sus pacientes. Aunque estas intervenciones se suelen realizar bajo anestesia general, algunas pueden llevarse a cabo con anestesia local y sedación. La correcta posición de los huesos faciales mediante la cavidad oral, no dejando ninguna cicatriz en la piel de la cara.
Los huesos afectados se mueven hasta la posición ideal y se fijan con mini-placas de titanio al igual que se hace en las fracturas faciales. Esto permite una rápida recuperación, y una re-incorporación al trabajo a las dos semanas a lo sumo.
Dependiendo del pacientes, en ocasiones es necesario movilizar solo el maxilar superior; otras veces el hueso que hay que desplazar es la mandíbula, aunque en la mayoría de los casos, para obtener un resultado satisfactorio necesitaremos movilizar ambos huesos. Por último, para obtener una armonía facial adecuada, habría que retocar el mentón, en lo que se conoce como mentoplastia.
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